Un diagnóstico médico oportuno es fundamental para evitar complicaciones de salud a corto, mediano y largo plazos. El interrogatorio detallado al paciente sobre su padecimiento actual, la realización de su historia clínica, la exploración física completa y en ocasiones el apoyo con exámenes de laboratorio y gabinete (como Rayos X y ultrasonidos), son indispensables en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) porque integran el proceso de un diagnóstico acertado.
El procedimiento para elaborarlo, explicó Violeta Pando Medina, especialista adscrita a la Unidad de Medicina Familiar número 28 del IMSS, permite reconocer una enfermedad o cualquier condición de salud, a través de un conjunto de signos y síntomas clave que dan nombre a los padecimientos.
La médico familiar señaló que la historia clínica es esencial, ya que a través de ella se detectan situaciones que el paciente no considera importantes, sin embargo, pueden ser antecedentes relevantes para un dictamen certero.
Pando Medina señaló que dictaminar con precisión un padecimiento es tan importante en el Seguro Social que por ello se han desarrollado herramientas como las Guías de Práctica Clínica, que ayudan a los médicos familiares a realizar diagnósticos eficaces que coadyuvan a resolver 90 por ciento de los casos en el primer nivel de atención.
Un interrogatorio preciso, enfatizó, permite al médico obtener la información necesaria para realizar un buen reconocimiento físico del padecimiento que lo conduzca a un dictamen correcto y a otorgar un tratamiento adecuado que alivie al enfermo.
En el IMSS, subrayó, los especialistas médicos son permanentemente evaluados en la calidad de su desempeño para que sus diagnósticos sean precisos y los tratamientos que se desprenden sean los correctos.
Un dictamen médico, con base exclusivamente en síntomas, advirtió, puede estar equivocado. Si a un paciente con dolor abdominal no se le interroga y explora de manera adecuada y éste se ha auto medicado, es posible fallar y diagnosticar una gastritis simple en lugar de un posible infarto, apéndice roto o infección en vías urinarias, según sea el caso.