NUTRICIÓN

La alimentación es
factor clave para
mantener tu salud.

La alimentación es factor clave para mantener tu salud.

Cuando comes de forma no adecuada, tu cuerpo se deteriora y pueden aparecer padecimientos como desnutrición, sobrepeso, obesidad, diabetes, presión alta, osteoporosis, infartos, embolias, algunos tipos de cáncer o incluso trastornos neurológicos.

Con el paso del tiempo, el cuerpo puede dejar de producir o absorber sustancias nutritivas como el calcio, ácido fólico, hierro y tiamina, entre otras, ya sea por una mala alimentación, enfermedades, complicaciones y cambios propios del envejecimiento, se debe asegurar el consumo de todos los grupos de alimentos en la ingesta diaria de alimentos.

Un ejemplo claro de los grupos de alimentos que se deben de ingerir se encuentra en el plato del buen comer el cual está formado por tres grupos lo cuales son verduras y frutas, cereales, leguminosas y alimentos de origen animal.

Prepara tus alimentos, con base en el plato del buen comer, utilizando alimentos propios de la región en la que vives. Te recomendamos incluir alimentos ricos en calcio para fortalecer los huesos; hierro y ácido fólico para prevenir anemia y vitamina C para mejorar las defensas y la absorción de hierro. Además, recuerda que el consumo de agua simple potable y la actividad física son la clave para la prevención y control del sobrepeso y la obesidad. Descarga aquí la Guía de Nutrición para saber más

La desnutrición es un problema de salud provocado por una mala nutrición que ocasiona anemia, pérdida de peso y sarcopenia (pérdida de la masa muscular) en las personas mayores. Puede ser causa de una alimentación insuficiente, mala absorción de nutrientes o por complicaciones de enfermedades como la tuberculosis, insuficiencia renal, cáncer y diabetes, entre otras.

La desnutrición no se presenta de manera repentina. Más bien, es un problema de salud que va sucediendo poco a poco. Si has perdido peso sin causa aparente, te sientes desganado o con sueño, puedes tener desnutrición. Acude a tu Unidad de Medicina Familiar para que evalúen tu estado de nutrición y sigue las recomendaciones que te proporcione el personal de salud.
Conoce más en la Guía de nutrición del adulto mayor

El sobrepeso y la obesidad se caracterizan por el incremento del peso corporal debido a una mayor acumulación de grasa en el organismo. Las principales causas involucradas en su desarrollo son: tener una alimentación con alto contenido en grasas y azúcares refinados, así como la falta o nula práctica de actividad física. Actualmente, se considera al sobrepeso y la obesidad un problema de salud pública, ya que, 7 de cada 10 personas mayores tienen sobrepeso u obesidad.

El sobrepeso y la obesidad son factores de riesgo para el desarrollo de enfermedades no transmisibles como diabetes, presión alta, elevación de grasas en sangre (colesterol y triglicéridos), infartos, embolia, algunos tipos de cáncer, entre otras, así como muerte prematura. La forma correcta de prevenir y controlar el sobrepeso y la obesidad es tener una alimentación adecuada, beber agua simple potable y practicar actividad física.

Considera que la manera más saludable de perder el exceso de peso es gradual y progresiva. Por otro lado, la pérdida rápida con dietas rigurosas, demasiado restrictivas o con productos “milagro”, llevan al fracaso y a descompensaciones orgánicas. Acude con tu médico familiar para recibir indicaciones del tratamiento que debes seguir para alcanzar y mantener un peso adecuado. Asiste a las sesiones educativas sobre alimentación correcta y actividad física en tu Unidad de Medicina Familiar.

Solicita a la trabajadora social que te incorpore a un grupo de ayuda de sobrepeso y obesidad. En el Centro de Seguridad Social, te enseñarán a preparar comidas nutritivas de bajo costo y a realizar un programa de actividad física. Durante el control del sobrepeso y la obesidad se recomienda pesarse y medir la cintura cada quince días para valorar la evolución.

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